A mi no me extrañan los resultados de las elecciones del pasado domingo, porque en definitiva es mucho más fácil ser de derechas que ser de izquierdas
Para ser de derechas lo unico que tienes que hacer es dejar que el miedo natural que sientes como mamífero dirija tu vida y tus decisiones.
Es facilísimo conectar con un discurso del miedo, porque miedo a lo desconocido tenemos todos.
El miedo es la más básica de las emociones, lo tienen la rata el caimán y tu perrete Alfredo. Lo difícil es trascender el miedo y elegir la empatía con el otro.
Lo fácil es agarrarte a tus privilegios y no hacer el esfuerzo de empatizar por el que está peor que tú.
Lo que nos hace humanos es precisamente la posibilidad de ir más allá del miedo, chatis.
Lo difícil es cuestionar tus privilegios y dejarle un hueco al que está jodido.
Así que ser de derechas es facilísimo: se trata de que prime el miedo y el egoísmo en tu vida Y A FUNCIONAR.
Es en definitiva: ser una persona de mierda

Esta gentuza innombrable con 52 escaños apela al miedo y a los más bajos instintos de nuestro cerebro reptiliano para convencernos de que el hombre es un lobo para el hombre. SER DE DERECHAS ES TAN FÁCIL…

Yo a veces también me comporto como una persona de derechas: Cuando voy en coche y tengo prisa, cuando estoy muy cansada (digamos en mis horas bajas) sale lo peor de mi.
Yo también soy clasista, machista, racista, aporofóbica y si me apuras un poquito homofóbica a ratos, pero no soy tan gilipollas como para vanagloriarme de ello.
No se trata de buenísimo, se trata de hacer el esfuercito de pasar por el mundo sin ser un trozo de mierda.